Como sabrás, un protector solar es un producto indispensable para los 365 días del año. Hace unas semanas os hacíamos una ronda de preguntas en Instagram para ver vuestros conocimientos sobre solares (lo puedes ver en nuestras historias destacadas). Hoy hablamos un poco más de los solares y qué nos podemos encontrar en ellos.
-
Qué llevan los protectores solares
En un protector solar solemos encontrarnos: sustancias cosméticas activas (que le dan un plus a nuestro solar, por ejemplo, conseguir un efecto anti-aging o antiacné); sustancias que mejoran las propiedades del producto (por ejemplo, para conseguir la textura que nos gusta o que no nos quede la piel blanquecina) y, lo más importante de todo, filtros solares.
-
Tipos de filtros solares:
Seguramente hayas oído hablar de los filtros solares físicos y químicos, pero ¿en qué se diferencian? ¿sabías que hay más? Te explicamos:
1. Filtros solares físicos:
Suelen ser polvos en cremas o leches. Su función es reflejar la radiación solar para que no pueda llegar a la piel. Por este motivo, en ocasiones, al extenderlos sobre la piel esta queda con un aspecto blanquecino. Actualmente, se está trabajando en evitar este efecto, y ya existen fotoprotectores con filtros físicos que no dejan este aspecto.
Lo mejor de los filtros físicos es que no son irritantes ni sensibilizantes, así que son los mejores para pieles muy reactivas o sensibles, como la de los bebés. Además, su efecto es prácticamente instantáneo. El inconveniente es que en su mayor parte no son biodegradables.
2. Filtros solares químicos
Son compuestos cuya estructura química les permite absorber la energía de las radiaciones. De esta forma impiden que la radiación se transmita a la piel.
Este tipo de filtros, por lo general, se expanden más fácilmente y no dejan aspecto blanquecino en la piel. Debemos tener en cuenta, sin embargo, que tenemos que echarnos el fotoprotector un mínimo de media hora antes de la exposición solar.
Por lo general, tienen buena estabilidad y tolerancia cutáneas y la mayoría de ellos son biodegradables.
3. Otros tipos de filtros: organominerales y biológicos
Además de los conocidos filtros físicos y químicos existen también otros tipos, como los organominerales (que son una mezcla entre físicos y químicos, ya que actúan absorbiendo y, además, reflejando la radiación) y los biológicos, que evitan el estrés oxidativo que se produce cuando no tenemos suficientes antioxidantes (haz click y visita este post en el que te hablamos de cuáles son los alimentos con más antioxidantes y por qué deberíamos tomarlos).
Antes de terminar, os dejamos con una curiosidad: ¿qué es eso de waterproof o water resistant? ¿Sabías que también existen productos sweatproof y rubproof?
Un protector solar que indica que es water resistant nos dice que resiste a dos inmersiones de 20 minutos. Por otra parte, un producto waterproof resistirá a cuatro inmersiones de 20 minutos.
A mayores, podemos encontrarnos la indicación sweatproof, que indica que resiste al sudor (así que sería lo que deberíamos buscar en una crema que vamos a utilizar haciendo deporte, por ejemplo) o la indicación rubproof, que nos indica que resiste a roces.
¿Sabías todo esto? ¿Tienes alguna duda más? ¡Déjanosla en comentarios o vente por la farmacia y la resolvemos!