¿Sabías que el pasado 12 de noviembre se celebró el Día Mundial contra la Neumonía? ¿Y que hoy es el Día Internacional de la EPOC y el Día Mundial de la Lucha Contra el Cáncer de Pulmón? Como todas estas enfermedades comparten una misma localización dentro del cuerpo, que es el sistema respiratorio, nuestra publicación de hoy te habla de los sistemas de administración de fármacos más usados por esta vía. Te traemos una guía de uso de distintos sistemas de inhalación:
En términos generales, nos podemos encontrar con cuatro grandes tipos de inhaladores:
Inhaladores de dosis medida:
Son los típicos inhaladores en forma de L, que tienen una boquilla en la parte de abajo y el contenedor con el medicamento en la parte superior. Son inhaladores multidosis, es decir, que dentro del cartucho hay una cantidad de medicamento suficiente como para liberar las dosis indicadas por el fabricante. Estos inhaladores se pueden utilizar con cámaras espaciadoras (de hecho, en ocasiones está altamente recomendado) y al usarlos tenemos que coordinar la inhalación con la pulsación. Los pasos que tienes que seguir para utilizarlos son los siguientes:
- Agitar el inhalador y retirar la tapa protectora.
- Soltar todo el aire de los pulmones de manera lenta y pausada.
- Colocar la boquilla del inhalador entre los dientes, por encima de la lengua, cerrando bien los labios alrededor.
- Empezar una inspiración lenta y profunda a la vez que se presiona la cámara que contiene el medicamento.
- Contener la respiración unos 10 segundos.
- Retirar el inhalador y cerrar.
- Es recomendable, sobre todo en caso de que el inhalador contenga como principio activo un corticoide, realizar enjuagues bucales después de la inhalación. Esto se hace para evitar la aparición de hongos en la boca.
Recuerda que hay algunos inhaladores de este tipo que se deben conservar en frío. Si no sabes si tu inhalador es o no de nevera, consulta en tu farmacia.
Inhaladores activados por la inspiración:
Con respecto a los anteriores, estos inhaladores presentan la ventaja de que no es necesario coordinar la respiración con la liberación de la dosis de fármaco, ya que esta se activa con la inspiración. También son multidosis y son más voluminosos. En términos generales, lo que tenemos que hacer con estos inhaladores es lo siguiente:
- Agitar el inhalador y retirar la tapa protectora.
- Soltar todo el aire de los pulmones de manera lenta y pausada.
- En algunos sistemas tendremos que levantar la tapa y en otros cargar la dosis tirando de ella hacia abajo (si tienes dudas al respecto de tu sistema, consúltanos).
- Colocar la boquilla del inhalador entre los dientes, por encima de la lengua, cerrando bien los labios alrededor.
- Empezar una inspiración lenta y profunda. Notarás en algún punto que el dispositivo se dispara, pero no dejes de inspirar hasta llegar al máximo de tu capacidad pulmonar.
- Contener la respiración unos 10 segundos.
- Retirar el inhalador y cerrar.
- Es recomendable, sobre todo en caso de que el inhalador contenga como principio activo un corticoide, realizar enjuagues bucales después de la inhalación. Esto se hace para evitar la aparición de hongos en la boca.
Inhaladores de niebla fina:
Son dispositivos en los que el fármaco está en una suspensión y que, cuando los activamos, se libera una neblina. Aunque es un sistema muy cómodo porque no tenemos que agitarlo y presenta un contador de dosis, actualmente hay pocos fármacos comercializados con esta tecnología. Una complicación que suelen tener los pacientes aparece en la carga del cartucho, ya que en los sistemas tradicionales era necesario aplicar mucha presión para cargarlos. Hoy en día el sistema se ha mejorado y la carga es mucho más sencilla. ¡Ven por la farmacia a que te hagamos una demostración!
- Una vez hemos cargado el cartucho (recuerda que, si lo necesitas, puedes acercarte a que te expliquemos cómo) y lo hemos preparado para la primera inhalación (pulsando el botón de liberación hasta que veamos una nube), procedemos a la inhalación.
- Con la tapa cerrada para evitar una liberación accidental de la dosis, giramos la base de cristal en la dirección que nos indican las flechas hasta escuchar un clic.
- Abrimos la tapa y expulsamos el aire de los pulmones de manera lenta.
- Presionamos el botón de liberación de dosis a la vez que realizamos una inspiración lenta y profunda.
- Mantener la respiración 10 segundos.
- Cerrar la tapa del inhalador.
- Es recomendable, sobre todo en caso de que el inhalador contenga como principio activo un corticoide, realizar enjuagues en la boca después de la inhalación. Esto se hace para evitar hongos en la boca.
En este caso, si han pasado más de 7 días desde la última administración debemos realizar una liberación al aire de una dosis para garantizar que la que inhalemos sea la adecuada.
Hoy en día se ha optimizado el uso de estos inhaladores y los nuevos sistemas permiten utilizar recambios de los cartuchos.
Inhaladores de polvo seco:
La diferencia de estos inhaladores con los anteriores es que estos no utilizan sistemas propulsores (ni aerosoles, ni suspensiones para nebulizar). Están diseñados para la inhalación directa de pequeñas partículas sólidas del fármaco.
Dentro de los inhaladores de polvo seco podemos encontrar modelos unidosis o multidosis:
En los dispositivos unidosis la dosis se administra en cápsulas. Los pasos que realizaremos serán los siguientes:
- Con las manos bien limpias y secas, colocamos las cápsulas dentro del dispositivo en la zona acondicionada para ello.
- Cerraremos el dispositivo y pulsaremos los botones (existen distintos modelos). Entonces, una aguja perfora la cápsula.
- Liberamos el aire acumulado en nuestros pulmones.
- Introducimos la boquilla en la boca inclinando ligeramente la cabeza hacia atrás y realizamos una aspiración rápida y constante.
- Aguantamos la respiración el máximo tiempo posible y espiramos por la nariz.
- Al terminar debemos comprobar que no haya quedado polvo en el compartimento, de lo contrario, volveremos a cerrar el dispositivo y realizaremos otra aspiración.
- Nuevamente, al terminar deberemos enjuagarnos con agua en caso de que el dispositivo contenga un corticoide como principio activo.
Para los dispositivos multidosis distinguimos entre recargables o precargados:
- En el caso de los dispositivos recargables tendremos un sistema similar a los dispositivos unidosis. Dentro del inhalador tendremos un soporte giratorio en el que se introducirá más de una dosis en un blíster. En este caso, los pasos a seguir son similares a los anteriores.
- En cuanto a los dispositivos precargados podemos encontrarnos a su vez con dos modelos
· El primer caso es el de alveolos: son inhaladores en forma circular que tienen en su interior una cinta con varias dosis. Esta cinta va rotando a medida que consumimos dichas dosis. Los pasos a seguir en este caso son los siguientes:
- Levantamos la tapa del dispositivo empujándola con el dedo.
- Con el inhalador orientado hacia nuestra boca, movemos la palanca para cargar la dosis hasta escuchar un clic.
- Expulsamos el aire de los pulmones con el inhalador aún alejado.
- Colocamos la boquilla en los labios y empezamos a inspirar profunda y lentamente.
- Mantenemos la respiración unos 10 segundos.
- Expulsamos el aire lentamente.
- Enjuagamos la boca (sobre todo, en caso de estar utilizando un medicamento con corticoides).
· El segundo caso es el de los reservorios: tienen forma tubular y presentan una rosca en la parte de abajo que se va girando para cargar el medicamento. Este caso es similar a los anteriores. Deberemos girar la rosca hasta haber cargado la medicación, soltaremos el aire de los pulmones y, con la boquilla entre los labios, realizaremos una inspiración enérgica y profunda. Nuevamente, en caso de estar utilizando corticoides, nos enjuagaremos la boca.
Si no has entendido algo de este post o quieres que te expliquemos cómo usar tu inhalador en concreto, vente por la farmacia.
¡Nos encantará ayudarte!